Si ha habido un fichaje mediático esta temporada en nuestro fútbol nacional, sin duda que ese es el del guardameta colombiano René Higuita. El portero que este mes cumplirá 41 años, engalana por nombre, la importación de nuestra liga y el hincha venezolano agradece su participación.
Sin embargo, sus actuaciones están dejando mucho que desear. Como es lógico, el guardameta colombiano ya no tiene los mismos reflejos de antes. Su lentitud es notable, tanto cuando tiene que estirarse, como cuando se maneja con los pies. Su equipo ha jugado 2 partidos y René ha recibido 3 anotaciones. El problema es que su mejor virtud en estos momentos (la experiencia). No la está usando de manera debida. Continúa intentando salir con pelota dominada hasta la media cancha, pero a diferencia de otros años, no piensa tan rápido y cuando suelta la pelota casi siempre es para perderla o de manera comprometida. Ayer Higuita pudo hacer perder 3 puntos a su equipo en una jugada tonta en las postrimerías del partido. Salía nuevamente con pelota dominada, en eso el jugador del Deportivo Italia Jansse Pérez le roba la pelota. Pero el colombiano le comete falta empujándolo y abalanzándose sobre la pelota fuera del área (debió ser expulsado si se aplica bien el reglamento, sólo vio amarilla). Y con esta pillería evitó que el mal fuera a mayores.
Personalmente pienso que está bien que venga gente como Higuita a nuestro fútbol. Pero que sepa que aquí también sabemos jugarlo, si él cree que nos está enseñando a jugar, está bien equivocado. Le recomiendo que se dedique a jugar como un profesional más de la plantilla de Guaros, de lo contrario, le auguro un efímero paso por nuestro fútbol criollo.
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