¿A donde se fue la magia?

Cuando la Confederación Brasileña de Fútbol decidió darle el cargo de seleccionador nacional a Carlos Caetano Bledorn Verri, mejor conocido como Dunga. Me dije ¿Y este qué ha hecho para ser el seleccionador nacional del país más laureado del mundo? No tardó mucho en plasmar su filosofía en el terreno de juego. Dunga fue un excelente medio defensivo, un jugador de corte, de garra gaúcha, con clase sí, pero principalmente era un guerrero. Es lógico que el inculque a sus jugadores ese espíritu guerrero y veamos a los 11 brasileños hacer trabajos de sacrificio en el momento que no se tiene la pelota y hacer ataques más directos y frontales cuando se recupera. Lo que deja muy poco margen para la filigranería y esto entristece de sobremanera al hincha brasileño.

Sin embargo, en la pasada Copa América los brasileños consiguieron ganarla, con un fútbol aburrido sí, pero sacando los partidos de manera inteligente y dándole un baño a la selección que mejor fútbol práctico hasta la final, por lo que Dunga salió airoso en su primera competición de envergadura en su corta carrera como director técnico. No convenció a nadie con su juego, pero se metió a la afición en un bolsillo al golear a su eterno rival en la final.

Se pensaba que con la llegada de los "magos" Kaká y Ronaldinho a la selección, éste Brasil iba a mostrar un fútbol más vistoso. Pero ocurrió todo lo contrario, su primera participación en las eliminatorias mundialista ha sido deprimente. El juego de la canarinha no pudo ser más displicente, como que si no quisieran jugar al fútbol, sus grandes figuras nunca aparecieron, ni un chispazo, ni una alegría, es más, los colombianos hicieron más para llevarse los 3 puntos. Lo peor de todo, es que el resultado es bueno para ambos combinados.

Otro gran problema que veo en Brasil, es la incomprensible falta de un 9 en el equipo. Ni Adriano, ni Ronaldo están en condiciones para ejercer esa posición. Wagnerlove, Afonzo y Fred han convertido entre los tres 5 goles en los últimos 20 partidos jugados por Brasil. Lo que deja un bagaje bastante pobre para la verdeamarelha. Lo que le puede quedar por probar al entrenador brasileño es Oliveira, Sobis y Pato. Yo probaría algunos partidos con el primero, ya se ha enfundado la verdeamarelha en el pasado, sin mucha fortuna. Pero ahora esta pasando por un buen momento con su club y la competencia por hacerse un hueco como 9 de su selección no está siendo muy fuerte que digamos, solo habrá que ver si Dunga piensa igual.

Ojalá que no tengamos que acostumbrarnos a ver a un Brasil especulativo fuera de casa, pero mientras los resultados acompañen al entrenador y se ganen títulos creo que vamos a ver esta versión descafeinada de la canarinha por bastante tiempo.